martes, 5 de noviembre de 2013

Cansancio físico




Algo que es muy común entre la humanidad es sentirse cansado físicamente. Pues lejos de lo que podríamos pensar, los Maestros son bien firmes al alertarnos de que el cansancio físico no procede del cuerpo físico sino de los otros cuerpos y aquí parece comprobarse una vez más aquello de que los cuerpos internos tiran la piedra y esconden la mano, resultando de ello la manifestación en el cuerpo físico de los efectos causados por los cuerpos internos, a saber: el etérico, el emocional y el mental. Y es que éstos ni siquiera cuando dormimos están en reposo; cuando nos echamos en la cama es el cuerpo físico el que reposa pero los otros siguen trabajando sin cesar y aún mientras parte del etérico se dedica a reparar el cuerpo físico de los excesos cometidos durante la vigilia, el emocional y el mental siguen trabajando. ¿Y qué son los sueños, sino los cuerpos astral (emocional) y mental haciendo de las suyas? 

Pues bien, nadie mejor que los Maestros de Sabiduría, aquéllos que ya se graduaron de la escuela Planeta Tierra, para hablarnos de tan interesante tema. 

“Si alguien que ha estado laborando físicamente siente la necesidad de descansar, tal persona debería primero sentarse en una postura cómoda y, entrando al gozoso reconocimiento de la Magna Energía de Dios, sentirla fluyendo a través de su mente y cuerpo cual un Poderoso Torrente Limpiador. Si los estudiantes practicaran este sencillo ejercicio a diario, en breve llegarían a un punto en que podrían invocar un Poderoso Torrente, de manera que en un período de tres a cinco minutos llegarían a sentirse completamente reposados. 

Esta afirmación podrá sonarles absurda, pero les aseguro que el sentirse cansado producto de la actividad externa no es más que una ausencia de gozo en lo que estás haciendo. Podrá ser algo del pensamien­to de la raza o de una condición inarmoniosa en el individuo. Al saber que el cuerpo de por sí no puede cansarse, entonces sabemos que el sentirse cansado es una falta de alegría o armonía en alguna parte de la conciencia. Naturalmente entonces, lo primero que hay que hacer es aquietar lo externo y sentir esa Poderosa Alegría y Paz llenando la mente y el cuerpo hasta rebosar, de la misma manera que se vería un cubo de agua llenarse hasta rebosar; y esa Radiación se difundiría a aquellos que la necesitan. El primer requisito para utilizar la Energía Inagotable es un estado de consciencia continuamente feliz y armonioso”. 

                                                                                                  
                                                                                                      Maestro Saint Germain